domingo, 22 de julio de 2012

Neuro-Pack

Las más recientes investigaciones realizadas personalmente, me han conducido a la conclusión de que tenemos que acabar con los juguetes irreales -y muchos de ellos, estúpidos- que asolan a nuestros pequeños (bueno, si no quiero ser machista debo decir "nuestros/as pequeños/as", o caer, incluso, en la tan novedosa como gilipollesca utilización de la arroba, tal que así: nuestr@s pequeñ@s )
He dado en pensar que los pequeños, en el acto de socialización que debe representar el juguete, se merecen algo más real, que los acerque mucho más a la sociedad que se van a encontrar, y así he decidido sacar a la venta, para la próxima festividad de Reyes, el Neuro-Pack.
Composición: Neuro-Mamá, Neuro-HijaMayor y Neuro-HijaMenor. Como elemento no incluído en el pack, pero que se puede adquirir por poco más, existe también un bonito Neuro-Víctima, realizado en Poliplástico Galvanizado Acerado capaz de resistir las más duras inclemencias.
Funciones Básicas:
Neuro-Mamá: La neuro-mamá habla, habla sin parar, pero no dice nada. Si la pones delante de una cocinita sabe hacer paellas y habichuelas con chorizo, y lleva un adminículo para insertarle una escoba con la que es capaz de dejarte la casita como los chorros del oro. La neuro-mamá es la que manda. Entiéndase, tanto las neuro-hijas como la neuro-víctima (en su caso) están programadas para seguir, con toda exactitud, los dictados de la neuro-mamá.
La neuromamá (voy a dejarme de guiones que ya me están llegando al colodrillo) posée un chip incluído que la dota de muy mala leche. Ese chip, sin embargo, no ha sido posible realizarlo con capacidad para almacenar más información, con lo cual nos ha salido una neuromamá que jode todo lo que puede, pero no tiene ni puta idea de nada. Es la neuromamá perfecta.
Neuro-HijaMayor: La neurohijamayor, sin embargo, al carecer de la programación necesaria para las paellas y la escoba, tiene la capacidad de elaborar teorías, eso sí, muy simples, como que las pirámides las hicieron los extraterrestres y que el 2012 se va a acabar el mundo. No se le puede preguntar el por qué, porque no lo sabe. Deben entender que tampoco da para más la cosa de la memoria que contiene. La neurohijamayor posee un talante básicamente putero, acorde con su afiliación progre. De hecho, está preparada para soportar una interrelación de roce, ya sea simultánea o consecutiva, con un mínimo de una docena de neurotontos. Eso sí, a diferencia de la neuromamá, a quien la mala leche se le nota, ésta está dotada de un aspecto encantador.
Neuro-HijaMenor: La neurohijamenor es la más elaborada de las tres que componen el neuropack. Posee un complejo sistema que la hace capaz de todas las funciones de la neuromamá y la neurohijamayor, aunque ello me ha llevado a compensar, necesariamente, el grado de perfección de cada una de las funciones hasta el punto de que puede dar la impresión de ser tontalhaba. Sin embargo, no lo es debido a un pequeño accesorio situado entre las piernas (no por nada, sólo como medida de protección física del accesorio por su endeblez) y mediante el cual es la que mejor consigue manipular a nuestro cuarto componente, la neurovíctima.
Neuro-Víctima: La neurovíctima posee un colgante en forma de cilindro alargado, completado por dos bolsas continentes de cojinetes, cuyo fin es darle el equilibrio necesario para que no se caiga con cada uno de los golpes que está destinado a recibir de las tres componentes básicas del neuropack. No habla, ni piensa, ni hace nada. Bastante tiene con aguantar. Pero aguanta mucho, y lo vendemos con una garantía de tres años, mínimo, al cabo de los cuales, normalmente, habrá que cambiarlo por otro, pero por lo que cuesta, uno cada tres años tampoco sale tan caro.
Espero que con este neuropack, nuestr@s hijit@s tengan, por fin, un juguete altamente didáctico que les prepare para la vida.
Lo encontraréis en tiendas especializadas. O me lo podéis pedir por correo. Eso si, previo envío de su importe.

1 comentario:

Anónimo dijo...

La osssstia. Me gusta.

Abraso de lussss