viernes, 21 de septiembre de 2012

Indiferencia

Dicen las malas lenguas -que últimamente ponen mayor énfasis en multiplicarse-, que "el peor de los desprecios es la indiferencia". Y van muchos, ¡y se lo creen! Es que queda tan bonito, tan redondo, tan cuadrado... tan romboidal, ya puestos...
Y digo yo, que a veces también soy mala lengua, que "la indiferencia es la crueldad de los mediocres". Y además aclaro que, a mi juicio, no existe nada peor que la mediocridad. Prefiero ser malísimo.
Nada, en esta vida -y ya puestos, en la otra-, puede resultar indiferente a una mente con un rescoldo residual de inteligencia. Nada que no sea absolutamente desconocido puede dejar de rozarnos en algún sentido.
Por tanto: ¡Mediocres del mundo uníos!... y a practicar esa indiferencia de la que tanto os ufanáis.